La lectura de los diarios argentinos es una actividad que se torna desagradable, en la medida que los empresarios periodísticos pierden toda mesura en la defensa de sus intereses políticos y económicos. Pero peor aún es la lectura de las tapas o una mirada de los titulares que van colocando en Internet. Una recorrida casi al azar por la Web en la tardecita de Buenos Aires sirve de ejemplo como para que el lector desprevenido sienta deseos de preguntar con cierta ingenuidad al editor en qué escuela de periodismo, carrera universitaria de comunicación o al menos en qué taller barrial aprendió a titular.
Comenzamos por Inforbae, el más suave. En la parte superior aparece, naturalmente, el lanzamiento de la fórmula presidencial de Eduardo Duhalde. Más abajo, una foto de Aldo Rico. ¿Habla de Malvinas?¿Opina sobre la fórmula de Duhalde? ¿Se arrepiente de sus intentos de golpe contra la democracia? No, el valeroso carapintada opina sobre las Madres de Plaza de Mayo y acerca de Sergio Shoklender. Su opinión es que las Madres sabían lo que Shoklender hacía y lo reafirma con un "sin dudas" que evidentemente proviene de sus competencias como auditor o como político avezado.
Seguimos en la recorrida del tren fantasma de los medios por otra joya de la libertad de expresión: Perfil. El diario de Fontevecchia, en una lección de manejo del castellano titula "Se pudrió todo en el INADI". La foto, el título, el manual de ética de la primera versión del diario -el que cerrara un mes después de lanzar a la calle-, la biblia y el calefón. Es la misma editorial que lanzó recientemente un diario disléxico. "Malo, berreta, Fontevechia", seguramente titulará mañana el diario "Libre", de la misma editorial.
Pasamos entonces a otra joya del periodismo independiente argentino. La tapa de Clarín tematiza con el lanzamiento de la fórmula de Ricardo Alfonsín y Javier González Fraga. El título es para una antología de lo que no debe hacerse, al menos en el periodismo serio: "Alfonsín pidió el voto independiente y criticó la corrupción del gobierno", dice sin una pequeña comilla, sin un artículo o un término que indique que la acusación sobre corrupción es responsabilidad de Alfonsín, no del diario. Evidentemente hicieron una gran investigación, que alguna vez mostrarán y por tal motivo Clarín adhiere a la opinión de Alfonsín. Cosas vederes en el periodismo independiente.
Finalmente, el más sutil de todos es La Nación, un diario que también perdió las formas y cuyos dueños parecen haber perdido los dos manuales de Estilo que editaron, pero que en su versión online de las 19.40 tiene un título que opina con mucha sutileza.
Tal vez no sea tanto, pero comparado con los otros casos, es casi un lujo de la rigurosidad periodística: "Cristina elogió la política de viviendas y mantuvo el silencio sobre Shoklender", dice. Combinar a la Presidenta hablando sobre viviendas y a Sergio Shoklender en un mismo título es al menos una muestra de dedicación artística. Afortunadamente no hicieron una acusación directa, no utilizaron palabras impropias y no consultaron a un militar golpista para que opinara científicamente sobre las Madres de Plaza de Mayo. Las historias del periodismo independiente tienen siempre reservada alguna sorpresa en materia de ética profesional y defensa de la libertad de expresión.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario