Frases de cabecera

-"Si no estáis prevenidos ante los Medios de Comunicación, os harán amar al opresor y odiar al oprimido." Malcolm X.

mayo 27, 2011

Raymundo Gleyzer y la cámara que ardía

Hoy 27 de mayo se cumplieron 35 años del secuestro y desaparición del periodista y cineasta Raymundo Gleyzer, quien fuera torturado en el campo de concentración de El Vesubio, responsabilidad del general Humberto Garmen y del coronel Hugo Pascarelli, tal como denuncian sus familiares en la edición de Página 12 de hoy. Entre otros trabajos, pasó por Canal 13 de Buenos Aires, Panorama, Time, Life, Parabrisas, Georama, Editorial Codex y Alexoraft. Lo recordamos con un fragmento de un testimonio de su madre, Sara de Gleyzer, que se publicara originalmente en el diario Mayoría y que luego fuera incluido en el libro “Con vida los queremos” de la Asociación de Periodistas de Buenos Aires (APBA) en 1985 y con un pequeño pero valioso video que encontramos en la gran red.

(…) “En La Plata, mientras estudiaba en la Escuela de Cine, hizo su primera película que se llama ‘La tierra quema’, a la que el Fondo Nacional de las Artes le dio un premio, pero antes había recibido una medalla de oro en Génova por la misma película. La terminó cuando tenía 18 años, en 1960.
‘La tierra quema’ es un documental. El toma una familia tipo del Norte de Brasil y estudia sus vidas, qué es lo que comen –comían víboras asadas, estaban contentos si había víboras asadas, porque no tenían otra cosa que comer. En general retrata sus vidas, escaseaba el agua, él pone una escena donde con una gotita de agua la mujer hace toda la comida.

Después de eso le surgieron muchos trabajos que lo llevaban acá, que lo llevaban allá, pero además sólo él hacía muchas cosas. El fue el primer camarógrafo-periodista que fue a las Malvinas, fue con el permiso de la Reina de Inglaterra, lo mandó Canal 13, donde trabajaba. En las Malvinas estuvo sólo nueve días porque se enfermó de los intestinos, tenía que quedarse un mes, pero estuvo nueve días. Todos sus trabajos fotográficos los publicó en la revista Panorama.

A eso de los 24 años, ya casado, se fue a México y estuvo un año y medio. Allí filmó ‘México, la revolución congelada’.

Cuando se lo llevaron yo inicié las denuncias, el Juez Sarmiento me dijo: ‘usted es la madre de Gleyzer, sabe que acá tenemos su última película’, yo le dije que me la diera, que la había hecho mi hijo, que era suya y él me dijo: ‘No, no, déjela, mejor está aquí’. (…)

Se lo llevaron a los 34 años, ahora tendría 41. Estaba casado y tenía un hijo precioso. (…) A Raymundo lo agarraron en la calle, con el coche. Ahora con ese coche pasa algo. Todavía siguen llegando boletas por contravenciones, así que ese coche está andando.

Radio del Plata y las violaciones

(Por Rubén Levenberg) Desde que la noticia pasó a ser tomada como una mercancía en lugar de un bien social, el periodismo se convirtió en una máquina de picar seres humanos, todo a costa de ganar un peso más. El acontecimiento no debería ser noticia, no es un servicio público, no le sirve a nadie y todos los manuales de ética periodística del mundo, todos los códigos de los diarios, radios y canales de TV señalan que las informaciones sobre violaciones y las que afectan a menores deben ser manejadas con el más extremo cuidado para evitar más daños a la víctima. Es una de las responsabilidades sociales que tiene la prensa y que tienen los periodistas.

No hemos hecho un paneo serio sobre la cobertura de una violación de una menor en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) que se produjo ayer jueves, pero como estamos en un blog y somos oyentes de Radio del Plata, diremos que el informativo de la emisora tiene la costumbre de convertir informaciones sobre violaciones -y si son de menores, peor todavía- en un caballito de batalla que repiten cada media hora, con una movilera en la escuela donde estudia la víctima, una niña que ya tiene bastante para lidiar de aquí en más, junto a su familia, como para que ahora la acosen periodistas que nos traen a la mente el recuerdo desagradable de hace algunos años, con la "periodista" Mercédes Ninsi diciendo por radio Mitre su frase célebre: "Un niño fue violado por un empresario boliviano de..." y nombraba el barrio y hasta la calle donde estaba la fábrica. Es discutible si el tema debe ser noticia, pero si la decisión editorial es publicarla, no se debe brindar ningún dato. Claro, así no sería negocio. 

mayo 26, 2011

Macri contra gremio de prensa: Moyano y Piumato en defensa de la FATPREN

Lo publicó JuanJo Salinas en su "Pájaro Rojo" y lo reproducimos nosotros en Prensa y Etica:


LA CGT REPUDIA LA PERSECUCIÓN DEL GOBIERNO DE  MACRI CONTRA LOS TRABAJADORES DEL SINDICATO DE PRENSA

La CGT repudia firmemente la clausura del edificio donde funcionan la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN), y la Obra Social de Prensa de la República Argentina por parte de inspectores de la Agencia Gubernamental de Control de la Ciudad de Buenos Aires, realizada en horas de la noche del martes 24 de mayo; y se solidariza con los trabajadores de prensa que hasta ahora no han tenido respuestas por parte del Gobierno de Macri para la inmediata reapertura del edificio.

Como nos comunicaron los trabajadores de prensa, los funcionarios del gobierno macrista irrumpieron con el auxilio de la fuerza pública en la sede sindical, mientras un grupo de menos de cincuenta compañeros celebraban el Día del Operador de Radio. Los inspectores, que en todo momento actuaron con prepotencia y mantuvieron su negativa a identificarse, argumentaron que para realizar una reunión de esas características debía contarse con una habilitación del edificio para la realización de fiestas privadas.

Cabe destacarse que la faja de interdicción que colocaron en una puerta de la sede de FATPREN no hacía referencia alguna a qué disposición del código contravencional se estaría violando y solamente constaba escrito a mano que "se clausura por funcionamiento y seguridad". Tampoco dejaron notificación alguna por escrito, ni citación para presentarse ante la autoridad competente a realizar el correspondiente descargo.

Por todas estas irregularidades es evidente que existe una segunda intencionalidad en el Gobierno de Macri en esta acción claramente persecutoria. Recordemos que el gremio de FATPREN  realizó,  junto a otros gremios de la comunicación,  una presentación judicial ante el decreto del actual Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que pretendía penalizar los bloqueos de trabajadores a medios periodísticos. Evidentemente, Macri mide con una vara a los trabajadores y con otra muy distinta a los dueños de los monopolios de la comunicación.

Es inadmisible que estas maniobras oscuras sucedan en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires, en el marco de la democracia. Recordemos que solamente una vez en la historia la sede sindical de prensa había sido avasallada en su autonomía,  y fue en marzo de 1976 cuando la dictadura militar irrumpió a fuerza de tanquetas para detener a sus dirigentes y destruir la documentación histórica del gremio.

Al mismo tiempo cabe señalarse que la  modificación de la clausura efectuada en el día de hoy resulta igualmente agraviante ya que  indica que se rehabilite el edificio clausurado pero prohibiéndose la utilización para festejos gremiales. Esto equivale a que en  "nuestra propia casa" el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires prohíba festejar nuestro cumpleaños. Por lo que repudiamos la arbitrariedad de la medida y reclamamos que cese de forma inmediata la persecución del Jefe de Gobierno de la Ciudad  a los compañeros del gremio de Prensa. 


                                                                                                                                                                                                                                                                                                Buenos Aires, 26 de mayo de 2011.


                       JULIO PIUMATO                                       HUGO MOYANO
           SEC. DE DERECHOS HUMANOS                  SECRETARIO GENERAL



mayo 25, 2011

La información que nadie publica: Macri clausuró el sindicato de prensa (FATPREN)

El acontecimiento que todos (todos, todos, absolutamente todos) los medios de comunicación de la Argentina decidieron que no se convertiría en noticia, a pesar de que hubo un cable de la agencia DyN y de las numerosas comunicaciones por parte de la FATPREN.

El despacho de DyN:

INSPECTORES DEL GOBIERNO DE LA CIUDAD CLAUSURARON
SEDE DE LA FEDERACION DE TRABAJADORES DE PRENSA
BUENOS AIRES, may 25 (DyN) - Inspectores del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires clausuraron con el uso de "la fuerza pública" la sede central de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN), en momentos en que se desarrollaba una reunión de afiliados al sindicato ATRANA para celebrar el Día del Operador de Radio.

El secretario General de la FATPREN, Gustavo Granero, repudió la decisión de los inspectores porteños, cumplida anoche, quienes según afirmó argumentaron que la entidad sindical "no contaba con habilitación comercial para realizar ese tipo de encuentros", lo que calificó como "un planteo insólito y llamativo ante una reunión privada".

El dirigente de la FATPREN había denunciado junto a otros gremios de la Comunicación al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, por un decreto de necesidad y urgencia que incursiona en acciones contravencionales, con días de prisión para casos de acciones sindicales que presuntamente atenten contra la libertad de prensa.

El comunicado de la FATPREN:

En horas de la noche del martes 24 de mayo, inspectores de la Agencia Gubernamental de Control de la Ciudad de Buenos Aires procedieron a la clausura del edificio donde funcionan la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN) y la Obra Social del Personal de Prensa de la República Argentina (OSPPRA).

Los funcionarios del gobierno macrista irrumpieron con el auxilio de la fuerza pública en la sede sindical, mientras un grupo de menos de cincuenta compañeros celebraban el Día del Operador de Radio.

Los inspectores, que en todo momento actuaron con prepotencia y mantuvieron su negativa a identificarse, argumentaron que para realizar una reunión de esas características debía contarse con una habilitación del edificio para la realización de fiestas privadas.


La faja de interdicción que colocaron en una puerta de la sede de FATPREN no hace referencia alguna a qué disposición del código contravencional se estaría violando, y solamente consta escrito a mano que “se clausura por funcionamiento y seguridad”. 


Tampoco dejaron notificación alguna por escrito, ni citación para presentarse ante la autoridad competente a realizar el correspondiente descargo.


Llamativamente, por la disposición edilicia de la sede de la Federación y la Obra Social, desde el exterior no se percibe en absoluto cuando se realizan actividades en su interior que pudieran llamar la atención de inspectores que circulen por la calle, por lo que es imposible no imaginar segundas intenciones en el procedimiento efectuado.


¿Tendrá que ver con la presentación judicial que hizo la FATPREN -junto a los demás gremios de la comunicación- ante el decreto por el cual el Jefe de Gobierno pretendía penalizar los bloqueos de trabajadores a medios periodísticos?


¿Le molestará al Jefe de Gobierno de la CABA que la FATPREN -junto al movimiento obrero organizado- apoye al proyecto Nacional y Popular que gobierna la Nación e impulse su correlato en la Ciudad de Buenos Aires?


¿El ingeniero Mauricio Macri tendrá el mismo celo para controlar las redacciones y talleres de los medios monopólicos de comunicación?


¿Le incomodará al titular del gobierno porteño que la FATPREN haya apoyado siempre la gestión del ministro de Trabajo de la Nación, compañero Carlos Tomada, ahora candidato a Vicejefe de Gobierno de la Ciudad?


¿Habrá solicitado autorización para realizar una fiesta privada el Jefe de Gobierno, cuando realizó una función circense para lanzar su candidatura el pasado lunes en el microestadio de Ferro?


Solamente una vez antes en la historia, la sede sindical de prensa había sido avasallada en su autonomía: cuando en marzo de 1976 la dictadura militar irrumpió a fuerza de tanquetas para detener a sus dirigentes y destruir la documentación histórica del gremio.


Reclamamos de las autoridades porteña el inmediato levantamiento de la clausura efectuada, junto a las explicaciones y disculpas del caso.


Igualmente, hacemos directamente responsable al señor Mauricio Macri por los perjuicios que pudieran generarse en la salud de los afiliados a la OSPPRA, por no poder dar respuesta a ellos a y los prestadores médicos mientras no sea posible desarrollar las tareas habituales en la sede social.


Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN)
Afiliada a la Federación Internacional de Periodistas (FIP)
Afiliada a la Confederación General del Trabajo (CGT)
Buenos Aires, 25 de mayo de 2011
Año del Trabajo Decente, la Salud y Seguridad de los Trabajadores
El comunicado de La Gremial de Prensa:

La Gremial pone en alerta a todos los trabajadores de prensa para denunciar y enfrentar la ofensiva del gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), que durante la noche del martes 24 de mayo clausuró el edificio en el cual funcionan la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN) y la Obra Social del Personal de Prensa de la República Argentina (OSPPRA).

Se trata de una acción intimidatoria y autoritaria de los inspectores de la Agencia Gubernamental de Control de la Ciudad que parece responder a los cuestionamientos realizados ante las medidas en defensa de las corporaciones mediáticas que promoviera recientemente el jefe de Gobierno Mauricio Macri. La Gremial se suma a la denuncia y se pone a disposición de los compañeros de la federación para apoyar y participar solidariamente en todas las acciones que se impulsen desde la FATPREN y al mismo tiempo convoca a denunciar este atropello político, intimidatorio y represivo por parte del gobierno porteño. La Gremial

Alfredo Bravo, el recuerdo de un luchador

El 26 de mayo de 2003, a los 78 años de edad moría en Buenos Aires el maestro Alfredo Bravo. Era lo que antes se conocía como "cascarrabias", un tipo gritón sincero, solidario, de los que hay pocos. Era un político de raza, un gremialista que se jugaba sin medir consecuencias, pero, sobre todas las cosas, era una buena persona, un hombre de una generosidad infinita y un gran dirigente, conjunción que no siempre se logra en un mismo individuo.

Socialista de nacimiento, entusiasta cuando había que ponerse una gran obra al hombro, sus convicciones lo llevaron por distintos caminos, pero siempre a cara descubierta, sin juegos dobles. Así era también en su trato con el pueblo, categoría que hoy los medios se empecinan en rebautizar como "gente".

Le gustaba escuchar y ayudar. Como diputado no dudó en refunfuñar cada vez que le  sugerían descansar un poco. Para Bravo, cada persona que estaba en la puerta del Congreso y pedía hablar con él debía ser atendida y así lo exigía también a sus asesores. Más de una vez regañó afectuosamente a su eterna amiga y secretaria, Rosa Jasovich Pantaleón, dirigente de la APDH y una de las grandes políticas feministas que la historia se empecina en olvidar.

Fundador de la CTERA (Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina), Bravo aclaraba ante la tilinguería de los medios, que lo llamaban "profesor", que era un maestro de grado, "y a toda honra". En la última dictadura militar fue arrancado del aula en 1977 cuando daba clases en una escuela y se convirtió en un desaparecido. Sufrió la tortura y la prisión hasta 1979, cuando un reclamo de los gremios docentes de todo el mundo llevó al propio presidente de los Estados Unidos a exigir su liberación. La tortura le dejó secuelas graves, especialmente en sus piernas, que según su relato fueron además las que más sufrieron cuando lo trasladaban de un lado al otro en una pila de cuerpos, algunos ya muertos, otros en camino.

En su gestión como funcionario de Alfonsín chocó con la burocracia del ministerio de Educación, los funcionarios de planta colocados allí por la dictadura y por gestiones anteriores, pero sobre todo por militantes silenciosos de la Iglesia católica que no querían al dirigente socialista metiendo mano en "su" espacio, la educación. "¿Eh? Hace un año firmé el expediente y la escuela tendría que tener todo el equipamiento", gritó alguna vez en un pasillo del ministerio cuando una directora le contó las penurias de su escuelita. Allí estaba la clave de la burocracia: La máquina de impedir, de bloquear todo lo que oliera a pueblo y a laicismo.

Se fue del ministerio de Educación cuando sintió que su amigo y compañero de la APDH, Raúl Alfonsín, había desandado el camino iniciado en 1983. "Cuando habló de economía de guerra yo estaba detrás de la puerta ventana de la Rosada. Volvió del balcón, lo abracé y le dije que se había cometido un error gravísimo, fue una despedida", nos relataba el maestro socialista allá por 1985, cuando la renuncia del ministro Bernardo Grinspun, su reemplazo por Juan Vital Sorrouille y el anuncio de la “economía de guerra” con una reducción del gasto público del 12 por ciento configuraron el primer derrape del radical. La Obediencia Debida y el Punto Final de 1986 fueron los detonantes definitivos para su salida, que de todos modos se iba a producir porque a esa altura los sectores más recalcitrantes del ministerio se sentían más fuertes que nunca y lo iban a desplazar.

Fundador de la Confederación Socialista, fue elegido diputado nacional en 1991 y vuelto a elegir en 1995 y 1999 como dirigente del Partido Socialista Democrático pero dentro de la Unidad Socialista. Había vuelto al PSD, del que se había ido en 1957 porque estaba en contra de que sus compañeros integraran la Junta Consultiva, creada por la dictadura que había derrocado a Juan Domingo Perón en 1955.
En el 2001 triunfó en las elecciones para senador por la ciudad de Buenos Aires por la alianza ARI, pero no pudo asumir debido a una peculiar interpretación de la ley electoral que hizo la mayoría del cuerpo. Oh sorpresa, su competidor era Gustavo Beliz, otra vez el Opus Dei, que no lo soportaba por su militancia socialista, su independencia y sus vinculaciones con los masones.

Había nacido el 30 de abril de 1925 en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay y murió de un ataque al corazón el 26 de mayo de 2003, horas antes de que un tal Néstor Kirchner asumiera la presidencia. En la Web pueden encontrarse homenajes de una señora llamada Elisa Carrió, quien se había colado en una investigación sobre lavado de dinero sólo para hacerse prensa de la mano del legislador socialista. Lo terminó de traicionar años después, cuando declaró a favor de las empresas involucradas minimizando la investigación que había usado para catapultarse. También se puede encontrar algún homenaje del senador Rubén Giustiniani, a pesar de que Alfredo Bravo nunca terminó de arrepentirse de haber hecho la unidad con el partido de Guillermo Estévez Boero. El tiempo le daría la razón. Lo que él consideraba el mal menor, la unidad a pesar de las diferencias, terminó con la persecución de sus compañeros más cercanos.

mayo 24, 2011

Los diarios se usan para envolver huevos

Uno de los debates mundiales sobre la función de los medios es si directamente tienen que tomar partido o si deben mantener cierta distancia respecto de los grupos políticos. En la Argentina el debate se cruza con la participación casi explícita de los grupos multimediáticos en las campañas y en muchos casos en el uso de su capacidad para fijar la agenda pública como una herramienta para imponer un candidato o destruir a otro. Javier Darío Restrepo, un especialista en ética periodística, fue entrevistado por el diario peruano La República y allí dijo entre otras cosas que “Un periódico que sale con propaganda a favor de un candidato sólo sirve para envolver zapatos, no para hacer historia”. En la Argentina no se envuelven zapatos con los diarios, pero es muy conocida la frase de los viejos periodistas cuando intentan frenar la soberbia de algún principiante que se considera importante porque entrevista a un ministro o a un empresario:  "Tu nota de hoy, mañana se va a usar para envolver huevos".

Por Flor Huilca

Son cada vez más frecuentes los conflictos entre medios de comunicación y los gobiernos en la región, ¿cómo podemos explicar estas tensiones?

–El conflicto por la libertad de expresión no es nuevo. En el continente hay un fenómeno político singular debido a presidentes con una concentración muy fuerte de todos los poderes. Llegan con una abundancia de votos, grupos políticos que los apoyan y la conciencia de que la prensa no está bajo su control. Pasa con Hugo Chávez, Rafael Correa, Daniel Ortega y Evo Morales, que buscan la manera de tener bajo control a la prensa, su juez natural. La prensa es el instrumento que tiene la población para equilibrar el poder en una democracia.

–Los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Ecuador e incluso Argentina alegan que los medios se han convertido en plataformas opositoras porque buscan su desestabilización política. ¿Qué papel están cumpliendo en esos países?

–La prensa tiene que ser absolutamente clara en que mucho más importante que su propia supervivencia es que la información llegue a la población. La información es el arma que tiene la población para someter a juicio a esos poderes. En todos estos países las poblaciones necesitan la orientación que les da el periodista a través de su conocimiento de la realidad. No es que los periodistas se vayan a convertir en editorialistas, les basta con mostrar los hechos tal como son, situados dentro de un contexto, para que se entienda, sobre todo cuando todos los gobiernos tienden a presentar la realidad de acuerdo con sus intereses.

–Pero en algunos medios prima la propaganda política y no la información veraz...

–Desde luego que uno puede presentar su punto de vista político, pero eso no sirve para nada, por el contrario, se convierte en un peso muerto. El periodista tiene la obligación de controlar su deseo personal porque está al servicio de la verdad, debe mostrar la realidad. No basta con presentar la verdad, hay que mostrarla de modo que la gente te pueda creer.

–Esa obligación a veces se frena por la posición de los medios. ¿En qué se respalda el periodista para cumplir su trabajo?

–Allí tenemos uno de los grandes obstáculos, además de las limitaciones económicas a las que está sometido el periodista. El mayor enemigo de la libertad de expresión en el continente son los malos sueldos. No solo los gobiernos con tendencias totalitarias están impidiendo que llegue una información de calidad a la población, sino también los dueños de medios de comunicación y los propios periodistas que lo consienten. Mientras se mantenga el interés económico como predominante y se tenga bajos sueldos, será imposible que haya libertad de información y, por consiguiente, la sociedad estará siempre sometida a una información manipulada.

mayo 23, 2011

Los independientes no siempre son rojos

Foto: Télam
En la España de las protestas, los acampes, los ajustes económicos impuestos por el FMI y la decadencia generada por la ambición desmedida y la falta de escrúpulos del sector financiero, el Partido Popular (PP) se quedó con una mayoría de distritos y, aquí va lo más importante, con la mayoría de los votos independientes y/o indecisos en las encuestas previas. El policía bueno del FMI, el Socialismo Obrero Español (PSOE) perdió parte de sus votos a manos de Izquierda Unida (IU) la fuerza que, al parecer, podría en el futuro canalizar algo de las protestas de las plazas.

La falta de profundidad en los análisis sobre lo que estaba ocurriendo en la España del ajuste y, sobre todo, la ya tradicional falta de encuadre histórico de parte de los medios -salvo honrosas excepciones- hicieron ver al movimiento de los indignados sólo como una expresión de rebeldía contra la burocracia política. Decimos "sólo", porque en sus consignas y seguramente en la voluntad de quienes salen a protestar existe tal objetivo, pero en la práctica, en el corto plazo, el mayor beneficiario es el PP.

¿Quién gana a su vez con el voto masivo al Partido Popular? El ajuste, ni más ni menos. La socialdemocracia europea aceptó sumisamente desde los años 80 su rol de trabajar con la derecha y hablar con la izquierda. El esquema les funcionó sin problemas. Las declaraciones de los líderes de los partidos socialdemócratas europeos en favor del ajuste económico en los países del Tercer Mundo, su participación en las intervenciones militares de los Estados Unidos y sus declaraciones izquierdistas abstractas, más cercanas a los demócratas de Nueva York que a los republicanos de la vieja España, no han sido una novedad de los últimos dos o tres años. Felipe González fue un adalid del ajuste en los países periféricos y del lobby de las empresas.

La experiencia de la privatización de Aerolíneas Argentinas es un símbolo del papel estratégico del PSOE. El saqueo comenzó en Madrid, con Iberia -que se llevó a Europa todo el material que tuviera valor- y se completó aquí en el nuevo continente, con American Airlines, empresa que se quedó con lo que los españoles habían olvidado, como el sistema de computación. Gobernaba el socialismo, vale la pena decirlo.

Pero si el PSOE cumple el papel de hablar con la izquierda y trabajar con la derecha, el Partido Popular es mucho más descarnado, porque habla y trabaja con una sola mano, la de hierro, que no propone para los manifestantes de las calles de distintas ciudades de España un cambio para que cese la marginalización de los sectores medios sino más ajuste económico, transferencia de riquezas de abajo hacia arriba y, a lo sumo, una mayor participación española en la promoción del ajuste en los países periféricos , mayor control en las fronteras para el ingreso de africanos e inmigrantes de América latina y políticas más concesivas con los bancos.

Ahora la responsabilidad de los manifestantes de Madrid, Barcelona y otros distritos de España es mayor. Tendrán que mostrar que su protesta va en serio y que no se queda en la maravilla de los discursos bonitos. Si quieren cambiar, tendrán que mostrar ahora que no se volverán a casa, contentos porque perdió un gobierno. Perdió el policía bueno, ganó el policía malo. Tendrán que mostrar que están más allá de la votación de ayer, que quieren cambiar la historia. No basta con decir que se es independiente, hay que demostrar la independencia no es una herramienta para los que gobiernan siempre, gane quien gane.

mayo 22, 2011

Mayo, del 68 al 2011. ¿Todo es igual?



“Seamos realistas, pidamos lo imposible”, rezaban los grafitis en mayo de 1968 mientras decenas de miles manifestaban por las calles de París. De aquella revuelta sólo quedó una generación frustrada que se acomodaría a los nuevos tiempos y un folkore revolucionario para consumo de los países periféricos.

Años antes, años después, en el Tercer Mundo se sucedían los intentos revolucionarios, las descolonizaciones y los movimientos de liberación. Las respuestas fueron los golpes sangrientos y la represión, en casi todos los casos alentados desde la misma Europa de la revuelta de mayo y desde los Estados Unidos del hipismo. La frutilla del postre serían luego los ajustes en los países de la periferia, que servirían para evitar las debacles económicas de las naciones centrales.A veces, hasta lo posible termina siendo imposible.

  
Se quedaron todos, pero algo cambió
“Que se vayan todos”, gritaron decenas de miles de argentinos en una manifestación de furia contra los dirigentes políticos que habían hundido al país en la fiesta del neoliberalismo con el aval de millones de votos. La Argentina llegó a la crisis de 2001 luego de privatizaciones y de ajustes impuestos por un FMI siempre gobernado por Estados Unidos y Europa. El dolor y la furia de aquellos años trocaron en construcción a partir de 2003, en un país que resucitó de la mano de un movimiento popular pleno de contradicciones y sin las certezas de los estudiantes de la Sorbona, pero que por experiencia propia intuye que hay ciertas palabras que duelen y que es mejor evitar.

Como reza el dicho popular, “el que se quema con leche, ve una vaca y llora”. Los que se quemaron con “privatización”, “ajuste”, “flexibilización laboral”, “reducción del Estado”, “desregulación de mercados” y otros términos impuestos en los años 90 hoy ven a un neoliberal y lloran. No todos, claro, porque los sectores que se benefician con su porcentaje del botín del ajuste son también numerosos y cuentan con un control absoluto de los medios de comunicación, convertidos en grandes conglomerados que hoy son propiedad total o parcial de grupos económicos de Europa y los Estados Unidos.

La indignación y el sistema
“No estamos en contra del sistema, el sistema está en contra nuestra”, es la consigna más destacada de los acampes rebeldes de la España de mayo de 2011. En una Madrid por la cual circulan 95 vehículos de marcas como BMW, Audi o Mercedes Benz por cada 5 autos de marcas baratas, comenzaron a acampar y protestar miles de jóvenes de sectores medios. Son víctimas de la crisis de los últimos años, que los dejó al margen de los beneficios de una economía europea que hasta hace pocos años enorgullecía a los españoles hasta la soberbia. Es un movimiento que sorprende, como sorprende todo lo que los pueblos son capaces de hacer en sus caminos plagados de errores y de aciertos.

En la España de 2006, como en los Estados Unidos, la fiesta de las hipotecas repartidas como caramelos para los sectores medios ya estaba en crisis, pero nadie quería decirlo, nadie quería tocar “el sistema”. Era mejor acusar a los inmigrantes del Africa o de América latina por lo que estaba por venir. Era más seductor sentirse millonario del mundo y aplicar el criterio lombrosiano para decidir si un turista era un visitante “honesto” o un aspirante a la inmigración ilegal. Las pieles oscuras afuera, las pieles blancas, previa revisión de sus billeteras, adentro y con vigilancia.


Si los jóvenes que descubrieron que el sistema está contra ellos son herederos de aquellos que pedían lo imposible, o si están emparentados con los que reclamaban que se fueran todos, o si se sienten más cerca de los que a su modo y con sus contradicciones cuestionan las recetas de la madre Europa de las corridas de toros o del padre toro de Wall Street es algo que se verá con el tiempo. Probablemente las primeras consecuencias del movimiento sean un triunfo del policía malo, el Partido Popular, en contra del actual policía bueno, el Partido Socialista Obrero Español. Dependerá de ellos y sólo de ellos decidir entre volverse a casa con el rabo entre las patas o seguir en la calle con muchas ganas de construir otro modelo, el suyo.